sábado, 19 de diciembre de 2009

Una nota de Navidad

Independientemente de las tensiones y ajetreos en que nos ha envuelto la sociedad de consumo y las contradicciones sociales que se evidencian en estos días, poniendo a ratos gris el brillo de las luces y bombillos, la Navidad todavía representa para mí un tiempo que posee un feeling especial y único en el año.

Muchos hermosos recuerdos vienen a mí, especialmente de los cándidos y sinceros tiempos del colegio de jesuitas en el cual estudié, las vacaciones en un pueblo del norte del país, los viajes a una zona tropical de Colombia en donde considero que tuve vivencias felices tan especiales que no se olvidan. Será que se cumple el viejo proverbio de que "todo tiempo pasado fue mejor"?, o puro y simple subjetivismo que nos hace recordar sólo lo bueno?… Por ahora, dejemos el tema para otro momento o para los filósofos.
 
Navidad me trae la alegría del “dar” y generar alegría en niños y niñas de mi familia más cercana a través de cariño y sencillos regalos, escogidos con mi pareja con tanto interés como si se tratara de algo especial para nosotros. Navidad también es una cena con mis familiares políticos costeños y sus amistades, disfrutando de su expresividad y un sentido del humor que nunca está demás…


Con frecuencia me ha tocado trabajar duro en algún proyecto a fin de año y he tenido muy poco tiempo para las actividades típicas de esta temporada, que ayudar a arreglar el árbol o el pesebre navideño (dos tradiciones que se conjugan en Ecuador), que enviar tarjetas de navidad a mis amigos y amigas más queridos, etc. Pero bueno, yo prefiero mil veces estar ocupado y no sin nada concreto y solamente gestionando trabajo.


Como buen freelance puedo atestiguar que esos tiempos de andar sin trabajo son duros sólo queda sacar optimismo “de dónde no hay” y esperar hasta el año próximo para enganchar un contrato que nos reanime la vida.

En fin, no quiero ser “aguafiestas” hablando de cosas negativas en este momento. Estoy contento, entre otras cosas, porque he emprendido con nuevos proyectos y hay algunas buenas expectativas para el próximo 2.010. Eso, por supuesto, me mantiene optimista, eleva mi autoestima y da sentido a mi vida de consultor social.


Más allá de las frases hechas y los "lugares comunes", quiero desearles con sinceridad:
Feliz Navidad a mis buen@s amig@s y a tod@s los lectores  de esta nota!!

Foto: Nacimiento navideño con motivos de la cultura Shuar. H. Medina

Próxima entrega: Haciendo un breve recuento del 2009.

sábado, 12 de diciembre de 2009

Tips para un CV bien estructurado

Sin lugar a dudas el Currículum Vitae (Hoja de Vida) constituye el “pasaporte” o la puerta de ingreso a un proceso que podría conducirte a conseguir un buen contrato de consultoría, algún trabajo que aunque no tan bien remunerado te saque de apuros económicos, e inclusive un empleo que te permita liberarte de estar enganchando  consultorías de rato en rato. A través del tiempo he aprendido algunas cosas prácticas acerca de cómo estructurar un Currículum que llame la atención a los convocantes de consultoría y empleo en ONG y agencias de cooperación. 
He aquí varias sugerencias: 
  • La información debe estar ordenada por temas de interés. Una sugerencia es ordenarla en el siguiente orden: datos personales, datos académicos básicos (títulos, especializaciones, diplomados), eventos de capacitación, experiencia profesional (consultorías realizadas), idiomas, publicaciones (de ser el caso), referencias personales.
  • Los trabajos profesionales que has desarrollado deben ubicarse en orden cronológico inverso, es decir desde el más reciente hasta el más antiguo.
  • Señalar el rol desempeñado en cada consultoría o trabajo. Por ejemplo: planificador, evaluador, sistematizador del proyecto, etc.Si no son muchos los trabajos desarrollados, describir brevemente los principales logros alcanzados en el proyecto en que se haya trabajado ayuda a una buena imagen profesional del candidato.
  • No hace falta, y generalmente resulta contraproducente, ubicar en el CV hobbies u otra información que no tenga que ver directamente con la actividad profesional del consultor. Al contrario, si se pertenece a alguna red profesional vinculada a tu rama profesional eso sí vale la pena incluirlo.
  • Aunque parezca un asunto de forma: un buen diseño, fuentes atractivas y  uso adecuado del color generan una buena impresión y motivan la lectura de un documento. ¿No es cierto que lo primero que te llama la atención de un libro es la portada?.
  • Sobra decir que la ortografía debe ser impecable. Nada más desmotivador para quien califica consultores sociales que encontrar faltas ortográficas en una Hoja de Vida.
Todo esto funciona por supuesto, y no me cansaré de señalar, si el proceso de selección es honesto (y no todo está ya “amarrado” para que gane algún amigo/a o familiar del director ejecutivo) y, además, si en el proceso de calificación de Hojas de Vida participa gente calificada técnicamente para hacerlo.
De todas maneras, y como muchas veces no queda alternativa para escoger, habrá que seguir enviando CVs bien estructurados y confiando en que, gracias a nuestras competencias, tendremos buenas posibilidades de ganar!

Próxima entrega: Una nota sobre la Navidad en Ecuador.

domingo, 29 de noviembre de 2009

Hay contratos y "contratos".


La notificación que has sido seleccionado/a para realizar una consultoría determinada es generalmente algo que produce mucha alegría y, por cierto, expectativa.

El paso subsiguiente es el contrato, tema que tiene varias aristas, dependiendo de cómo se lo mire.


Durante estos años de consultor “free lance” (más “free” que “lance”, como les digo a veces a mis amigos) me he enfrentado con las más diversas formas y maneras de establecer esas relaciones contractuales que obligan al profesional contratado y a la organización o institución contratante a determinados compromisos durante un tiempo estipulado previamente, que, dicho sea de paso, casi siempre es menor al realmente necesario para desarrollar los productos de consultoría demandados.


Generalmente, y esto es prácticamente una constante, el contratante impone sus condiciones en el caso de la consultoría social. En Ecuador, a nivel de honorarios, condiciones y tiempos de ejecución de trabajo, el consultor tiene muy poco margen de negociación, especialmente porque no existe una ley que ampare nuestra labor. En consecuencia, no existe, una tabla que defina los montos de honorarios a cobrar por consultoría, de acuerdo al tipo de trabajo, tiempo, lugares de ejecución, presupuesto del proyecto, etc.


Hay que decir, en este punto, que existe una sutil pero importante diferencia entre lo legal y lo legítimo. Y esto puede evidenciarse, en ocasiones, en lo que se refiere a la  famosa cláusula de “terminación unilateral del contrato”.
Así, en ciertos contratos se posibilita de forma dolosa e injusta la terminación unilateral del contrato, sin exigir una justificación técnica y/o económica previa y sustentada de parte del contratante y, además, para remate, sin dar lugar a indemnización alguna!!. Así pues, si el contratante es un inepto y/o un corrupto que no logra dimensionar el alcance de tu trabajo ni valorarlo en su justa dimensión, o simplemente le caes mal y “no eres santo de su devoción”, puede despedirte el rato en que se le pegue en gana (como se dice vulgarmente), y quedarse tan tranquilo mientras tú te debates en la impotencia. En el caso de estas terminaciones unilaterales de contrato sin justificación objetiva de incumplimiento por parte del contratista (consultor) el contratante está actuando “legalmente” pero, lamentablemente, consumando un acto ilegítimo, desde el punto de vista ético, que perjudica injustamente al consultor.


Felizmente, en mi vida profesional no he tenido problemas con contratos en un 99% de los casos, ya que la gran mayoría de contratantes han sido agencias de cooperación y ONG solventes y serias que han cumplido con sus compromisos. Sólo en una ocasión tuve que, por fuerza de circunstancias, trabajar contratado por un ejecutivo de una institución estatal que afirmaba, sin el menor asomo de vergüenza, que un proyecto (entiéndase proyecto socio ambiental) él lo podía redactar en 2 horas y que el monitoreo de éste se lo podía realizar tan fácilmente como mirar el paisaje desde la ventana de su oficina!! Bueno, aquí recordé las palabras de un viejo y sabio jesuita  que ante las afirmaciones tontas y apresuradas decía: “no te preocupes hijo, que la ignorancia es atrevida”…


Próxima entrega: Tips para un Currículum Vitae bien estructurado.

miércoles, 18 de noviembre de 2009

Tips para una entrevista de trabajo

Aunque yo no soy el más indicado para hablar de este tema, ya que no me agrada esa especie de “interrogatorio” sobre algunos temas no muy trascendentes, a nivel laboral, en que se convierten algunas entrevistas de trabajo, y todavía no estoy ciento por ciento tranquilo cuando me enfrento con un potencial contratante, voy a comentar algunas cosas al respecto, partiendo de mi experiencia. 
Antes de nada, hay que partir del supuesto que la entrevista será llevada a efecto por personas que manejan bien el tema o área de trabajo para el cual te podrían contratar y que, especialmente, este proceso no constituye sólo un mero trámite para validar una contratación previamente “arreglada”, cosa frustrante que lamentablemente se da en ocasiones…
De mis lecturas respecto a “cómo tener éxito en entrevistas de trabajo”, y de mi propia experiencia, me parecen rescatables las siguientes sugerencias:

  • Es ideal informarse previamente respecto de la institución u organización contratante, sus objetivos, áreas de trabajo, proyectos que ejecuta, sector poblacional con el cual trabaja. De esta forma no te tomarán por sorpresa cuando te pregunte si escuchaste hablar de la organización antes o cosas por el estilo y, de paso, ellos se sentirán como un ente conocido a nivel social.
  • Procurar estar a tiempo es fundamental, ya que llegar atrasado es dar una mala imagen de inicio. Y dicen que “la primera impresión es la que cuenta”, verdad?. Además, así tienes tiempo para relajarte un poco y “chequear” un poco el sitio en donde podrías trabajar o en el cual trabaja la gente que te contratará como consultor, imagen que te sitúa en un espacio concreto.
  • Para calmar los nervios nada mejor que llevar algo para leer (algún tema nada complejo, por supuesto). Esto, por cierto, si la espera lleva un poco de tiempo.
  • Aunque se afirma que “el hábito no hace al monje”, siempre es bueno ir con buena pinta. No exagerar y aparentar ser natural es lo mejor: no hace falta, en nuestro caso de consultores sociales, ir de terno y corbata pero tampoco de camiseta vieja y jeans deshilachados… Eso hay que dejarlo para casa u otros momentos. Alguien dijo que “no sólo hay que ser, sino también parecer”, y ese me parece un sabio consejo.
  • Aparentar calma y seguridad en lo que se responde y afirma es fundamental. De esta manera lograrás proyectar la imagen de un profesional que sabe lo que dice y hacia dónde hay que ir. En estos momentos, aunque te estés muriendo de nervios nunca lo des a notar.
  • Manifestar tus cualidades  profesionales (y humanas, de ser necesario) de una manera  clara, concisa y convincente  es muy importante.  No hay que exagerar: ni demasiada auto alabanza ni excesiva humildad.
  • Pensar positivamente: si te llamaron es que tienen interés en conocerte mejor y ese puesto o contrato puede ser tuyo!
Próxima entrega: Hay contratos y "contratos"…



lunes, 12 de octubre de 2009

Favor enviar su Hoja de Vida a…


Esta típica frase, localizada al final de muchos avisos clasificados de los diarios, en los cuales se oferta algún empleo o consultoría, representa para el consultor free lance sin trabajo el inicio de un período de esperanza y expectativas y, dependiendo del caso, también el inicio de una de tantas frustraciones que tendrá que afrontar en la búsqueda de un contrato.

Vienen a mi mente en este momento las decenas de Hojas de Vida (también denominadas “Currículum Vitae”, como ustedes bien conocen) que he impreso, enviado por correo convencional y también por correo electrónico en esta continua búsqueda de trabajo. En tiempos de crisis, en esos sobres y documentos virtuales se deposita una gran esperanza…

La gran mayoría de las veces no sabes quién o quiénes analizarán tu información allí registrada, bajo qué criterios, si serán personas con competencias suficientes como para seleccionar el mejor, etc., etc. En todo caso, no queda más que hacer fuerza y rogar a los santos de tu devoción que valoren tus muchos años de estudios, tu trajinar laboral por aquí y por allá en trabajos relacionados, y no te dejen a un lado por algún “pana” o amiga que ya se palanqueó el contrato de antemano.

Si tienes suerte y te contactan el siguiente paso es la entrevista, y ahí sí que uno se encuentra con el “folklore nacional”… En las famosas entrevistas me he encontrado con entrevistadores de todo tipo: desde funcionarios y funcionarias muy amables que te ofrecen un café o agua aromática, hasta una mujer que parecía una momia, por lo fea y agria, que no mostró ninguna reacción durante los 15 minutos de entrevista, aunque su compañero sí sonreía y festejaba cualquier anécdota de mi parte. Hace poco me enteré que aquella mujer ocupa un puesto directivo que tiene que ver con seguridad pública…

Los momentos previos traen su dosis de tensión, no hay qué negarlo. En general, los “entrevistadores” son gente que pregunta solamente lo básico, lo que tiene que ver con tu formación académica y experiencia laboral en el tema de la consultoría o potencial empleo, pero también hay los que te preguntan más detalles de tu vida y adaptabilidad a ambientes laborales singulares. Alguna vez, en una fundación ambientalista bastante conocida en Ecuador me entrevistaron 5 personas y de entrada me inquirieron sobre cuál creía yo que era “mi principal defecto” ☹?.

“Nosotros le llamaremos”, es la frase prefabricada que cierra el proceso convocatoria-entrevista y da paso, igualmente, a otro período de expectativa e incertidumbre, que de culminar con un “sí” resolverá temporalmente tu necesidad de trabajo, de hacer lo que te gusta y te realiza como profesional y como persona. Si la llamada telefónica que le sucede, o un e-mail“ de agradecimiento por participar en el proceso de selección”, vienen acompañados de noticias negativas no quedará más que asimilar el golpe y volver a los avisos clasificados de los periódicos, a la internet, a las llamadas telefónicas a los amigos y conocidos, en fin, a un círculo vicioso que hay que aprender a manejar, sin duda.

miércoles, 7 de octubre de 2009

Los inicios



Mi camino comenzó a delinearse cuando en 1992 (uff! sí que ha pasado el tiempo!…) se publicó mi primer libro, titulado Los Chachi: supervivencia y Ley Tradicional, en Quito, Ecuador. Este hecho, tan significativo para mí, posibilitó el ser contratado por una fundación internacional para realizar una consultoría de investigación y planificación en la provincia de Esmeraldas, a nivel de las 3 zonas en donde se asientan las comunidades indígenas Chachis, mal conocidas en aquel tiempo como “Cayapas" …

A partir de ese momento mi vida laboral (y la otra, también…) ha trajinado entre programas y proyectos sociales y socio ambientales auspiciados por agencias de cooperación internacional para el desarrollo, ONG y, eventualmente, instituciones estatales, ejecutados en la costa, sierra, amazonía e inclusive en las Islas Galápagos, Ecuador.

Conocer gente de diversas culturas y cosmovisiones, sus aspiraciones, expectativas y problemáticas constituye, sin duda, un buen regalo que la vida me ha dado a través de este trabajo. Eso de andar conociendo mi país en sus cuatro costados y recorriendo lugares donde muy pocos o ningún turista va, a pretexto de planificar, evaluar o sistematizar un proyecto, es una de las mayores satisfacciones que tengo.

Pero bueno, de ese tema hablaremos más adelante… y también de sus "bemoles", porque no todo es miel en la vida, no es cierto?. :)



lunes, 5 de octubre de 2009

Eso de ser consultor "free lance"…

Harto ya de trabajar en una institución pública decidí renunciar y "lanzarme al ruedo" de la vida laboral independiente, hace aproximadamente 15 años…
En esos tiempos, lo que representaba una situación casi trágica para muchos de mis compañeros, para mí significaba liberarme de horarios rígidos, sueldo bajo, estar atado a un escritorio, pidiendo permiso para todo, y especialmente liberarme de jefes sin competencias suficientes para ejercer cargos directivos, pero que habían llegado allí gracias a favores políticos y/o relaciones sociales.

Hacer un recuento de todo el tiempo transcurrido, objetivarlo, y resaltar lo bueno, lo malo y lo feo del trabajo como consultor independiente, casi sin "horario ni calendario", como dice la canción "Caballo Viejo", son algunos objetivos de este blog. Sin duda, esto me será de gran ayuda como catarsis y, ojalá, en buena hora, podrá servir de nexo con quienes trabajan o se interesan por esta difícil pero super interesante forma de ejercer una profesión relacionada directamente con las ciencias sociales.

No hay que olvidar que más que un trabajo, la consultoria social "free lance"es una
forma de vida


Fotografía: niña indígena del Quilotoa (Cotopaxi, Ecuador). Por: H.Medina